En el marco de la conmemoración del Día Nacional de la Dignificación de las Víctimas del Conflicto Armado Interno, el 25 de febrero de 2020 se realizó en el campus de la Universidad Rafael Landívar, en la cabecera departamental de Quetzaltenango, la presentación del libro Cocop: crónicas del genocidio.
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La actividad se realizó con estudiantes de la Licenciatura en Relaciones Internacionales y fue desarrollada por representantes de CAFCA y del Bufete Jurídico de Derechos Humanos (BDH).

En el marco de la conmemoración del Día Nacional de la Dignificación de las Víctimas del Conflicto Armado Interno, el 25 de febrero de 2020 se realizó en el Palacio Municipal de la ciudad de Quetzaltenango, una exposición de fotografías relacionadas con procesos de exhumación y la presentación del libro Cocop: crónicas del genocidio.
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La actividad fue organizada por el Centro Ecuménico de Integración Pastoral (CEIPA), la Comisión Ciudadana de Transparencia y Probidad de Quetzaltenango, CAFCA y sectores de la sociedad civil quetzalteca. Entre los expositores se contó con la participación de un representante del Bufete Jurídico de Derechos Humanos (BDH).

El 19 de febrero de 2020 en la cabecera municipal de Nebaj, se realizó la presentación del libro COCOP: crónicas del genocidio. En la actividad estuvieron presentes los pobladores de la aldea Cocop, a quienes se les entregó ejemplares de la publicación, con el propósito de devolver de manera impresa y con datos complementarios, los testimonios que proporcionaron, relacionados con la masacre ocurrida en dicha comunidad durante el Conflicto Armado Interno.

El 30 de enero de 2020, el Centro de Análisis Forense y Ciencias Aplicadas (CAFCA), entregó en la Fiscalía Municipal de Nebaj, los restos de dos personas de sexo masculino, las cuales fueron exhumadas por peritos de nuestra institución, en la casa parroquial de la cabecera municipal de Sacapulas. Los mismos fueron localizados de manera fortuita, mientras se realizaban trabajos de albañilería en dicho recinto. Durante el conflicto armado, las instalaciones de la iglesia católica en Sacapulas fueron ocupada por personal militar.
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Los restos fueron recibidos por representantes de la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, Sacapulas. Previo a su inhumación en el cementerio del lugar, los osarios fueron colocados en un altar, elaborado en el templo católico de la cabecera municipal de Sacapulas, en memoria de los mártires de la Diócesis del Quiché, martirizados durante el conflicto armado.
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